Compromiso cubano con la vida

Tal vez la noticia no ocupó  grandes titulares como la  decapitación  ante  las cámaras de  reporteros norteamericanos,   o  el referendo independentista entre Escocia y el Reino Unido, o simplemente  las imágenes holográficas de Michael Jackson  en la última entrega de los premios Billboard, sin embargo la trascendencia humana de la ayuda solidaria de Cuba a África, va más allá de cintillos rimbombantes que circulan y se propagan  como spam en  las redes sociales. 
La incondicionalidad de la isla caribeña ante la epidemia de ébola que azota a varios países del continente africano y  hace peligrar la salud mundial,  pone de manifiesto la vocación internacionalista de un pueblo que comparte lo que tiene y  asume  como suyo cualquier dolor por muy ajeno que sea,  práctica que se remonta a mucho  tiempo  atrás, sobre todo en materia de salud.

Contribuir al esfuerzo contra esa peligrosa fiebre hemorrágica se suma a una larga trayectoria en la cual Cuba no sólo ha aceptado el difícil reto de enfrentar directamente a una enfermedad letal como el ébola  o a catástrofes naturales, sino  también la de prevenir con labores de promoción y  educación,  para dar acceso a los menos favorecidos del mundo  a los servicios de salud, educación y cultura.

Ahora se trata de una lucha de vida o muerte en la que las víctimas aumentan a cada minuto y la Organización Mundial de la Salud y las propias Naciones Unidas convocaron a  Cuba, por el prestigio ganado a incorporarse en la avanzada internacional, en la que fuimos los primeros en dar el paso.

Para orgullo nuestro tres matanceros  de manera voluntaria integran el contingente médico que saldrá hacia Sierra Leona a combatir la epidemia, con una experiencia respaldada por años de consagración a salvar vidas humanas en condiciones difíciles. Una batalla que libraremos con profesionalidad, honor y sobre todo humanismo porque el compromiso de los cubanos es y será siempre con la vida.