...hay canciones que salen de un tirón y otras que demoran años en hacerse…
Tony Avila
No he tenido oportunidad de preguntarle a Tony Ávila como llegó a esta
canción que me 
regresa a mi infancia, cuando escuchaba a mi abuela, recomendar ponerle
una velita a San Antonio para encontrar novio, a aquellas que demoraban
en hacerlo o pasaban de cierta edad sin casarse.
Mimi
o Milpe (mil pellejitos como le decía mi hermano, por sus innumerables
arrugas) respetaba mucho a ese santo de los matrimonios y al
pasar por la iglesia de San Antonio, ubicada en la esquina de la calle
de Calzada y López en Cárdenas, Ciudad Bandera de Cuba nos contaba como las muchachas solteras
de su tiempo compraban una imagen de San Antonio y las ponían al revés
como castigo, hasta tanto no encontraran un buen marido.
Hoy 13 de
junio, es el día de fiesta de este santo y decidí entonces compartir la
letra de un tema de ese otro Antonio “Tony” Ávila, tan especial, que me
emocionó con su música dedicada a la iglesia de San Antonio, muy cerca de donde creció y se hizo trovador.
Tiene mi barrio una cruz
Para espantar los demonios
La iglesia de San Antonio
Llena a sus hijos de luz
Y aunque devoto no soy
De santos y estampillas
Me embriaga la maravilla
Aunque a la iglesia no voy
Suele el domingo llamar
El campanario a la misa
Lleva la gente de prisa
Toda su fe al altar
De niño he visto volar
Esa cruz sobre las nubes
Más de una vez me detuve
En la puerta de cristal
Y aunque a tus predios no fui
Yo correteaba en tu esquina
Por ser tan alta y divina,
Siempre cuidaste de mí
Hoy me vuelvo hacia ti
Y humildemente levanto
Mi guitarra y este canto
Agradecido por ti
Tiene mi barrio una cruz
Para espantar los demonios
La iglesia de San Antonio
Llena a sus hijos de luz
Y hoy me vuelvo hacia ti
Y humildemente levanto
Mi guitarra y este canto
Agradecido por ti,
agradecido por ti…
agradecido por ti…
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