Ciudad Bandera

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jueves, 25 de octubre de 2018

Pedalear en Cárdenas, 190 años después

Por la Licenciada María Teresa Clark Betancourt
Presidenta de la Filial de la Unión Nacional de Historiadores de Cuba  (UNHIC) en Cárdenas.

Cárdenas ha sido escenario de decenas de acontecimientos primigenios en nuestra nación

Al llegar a la ciudad matancera de Cárdenas, 190 años de historia y cultura acogen al visitante. Su fundación, el 8 de marzo de 1828, se realizó por la gestión ante la junta de la Real Hacienda de una de las más prominentes personalidades del siglo xix en Cuba, el subdelegado Claudio Martínez de Pinillo; el conde de Villanueva comprendió la necesidad de los hacendados comarcanos de un embarcadero para el traslado de sus producciones, y la aprobación la obtuvo el 17 de enero de 1827.
El 8 de marzo de 1828, el agrimensor público Andrés del Portillo presentó el Plano de Cárdenas en el espacio, devenido en este acto oficial como Plaza Fundacional, y quedaron trazadas las primeras cuatro calles y avenidas.
Cárdenas es la única urbe cubana conocida con los apelativos de «Ciudad de primicias», por ser escenario de decenas de acontecimientos primigenios en nuestra nación, y el de «Ciudad Bandera».

El 19 de mayo de 1850 fue invadida por las tropas anexionistas al mando del general Narciso López. Tras intensos combates en la plaza de armas tomaron el edificio que hacía función de Tenencia de Gobierno, hoy hotel «La Dominica», y enarbolaron, por primera vez en la Isla, la bandera tricolor diseñada por el matancero Miguel Teurbe Tolón.  
Un año más tarde, en 1851, la escritora sueca Fedrica Bremer, como parte de su recorrido por algunas naciones del continente, incluyó a Cuba. La Habana, Matanzas y Cárdenas fueron motivo de su atención. En carta a su hermana, el 19 de marzo de ese año, expresó: «Cárdenas es una pequeña localidad, con el mismo tipo de construcciones que La Habana y mantiene un intenso comercio de azúcar y el melado». También se refirió al primer museo de historia natural instalado aquí en 1848 por el alemán Juan Cristóbal Gundlach.
Otra de las denominadas primicias se efectuó cuando ya ostentaba el título de villa, otorgado en 1853 por la Reina de España, según consta en las Actas del Cabildo. Fue la inauguración pública y solemne de la primera estatua al Almirante Cristóbal Colón en América, el 26 de diciembre de 1862, en la Plaza Fundacional, obra del escultor de Cámara del Rey, el valenciano José Piquer.

PATRIMONIO RESGUARDADO
Uno de los lugares más visitados diariamente por cubanos y extranjeros que llegan a la Ciudad Bandera de Cuba es el Museo Oscar María de Rojas, segundo fundado en el país, el 19 de marzo de 1900. La institución fue declarada Monumento Nacional en el 2002, junto a sus invaluables colecciones.
En la primera de las salas, denominada de los fundadores, dan la «bienvenida» la mecedora donde la gran Avellaneda, laureada en Cuba y España, solía descansar; hay también un ejemplar de la obra El Artista Barquero, escrita durante su estancia en la ciudad y la única redactada en Cuba. A todos los visitantes sorprenden las pulgas vestidas o el cuadro ilusionista, la mascarilla de Napoleón Bonaparte y la del General Máximo Gómez…
El 5 de diciembre del 2003, el Comandante en Jefe Fidel Castro presidió el acto de reapertura después de su reparación capital. Recorrió el Museo, observó emocionado la sala dedicada a nuestro Héroe Nacional José Martí, se detuvo ante cada pieza: la tribuna desde la cual pronunció trascendentes discursos en la emigración; la mesa donde redactó las Bases del Partido Revolucionario Cubano; el escritorio y el reloj de su oficina en el periódico Patria, entre otras que hacen de esta colección martiana una de las más importantes de Cuba.
Otros valiosos museos circundan el parque José Antonio Echeverría, como son la Casa Natal del presidente histórico de la Federación Estudiantil Universitaria y el Museo a la Batalla de Ideas, inaugurado por el líder de la Revolución el 14 de julio del 2001.
«El primero de Cuba y del mundo. Habrá otros como este, pero aquí nació la idea y será escuela y ejemplo para los demás. La batalla de ideas no puede perderse, ni se perderá, la especie humana depende de ella», así escribía el Comandante en Jefe en el libro de visitas.
El Museo posee reveladores exponentes del reclamo por el regreso a la Patria del niño Elián González y de los Cinco Héroes. Desde el mirador se pueden divisar la ciudad, la estación de trenes del siglo xix, y la belleza de una urbe que nace en las cálidas aguas del norte de la provincia de Matanzas.
Cárdenas fue, también, el segundo lugar de Cuba con ferrocarril en el que trabajaron esclavos africanos y culíes chinos. La huella de la presencia china, como la francesa y la inglesa, ha quedado en los apellidos de una parte de los habitantes de este municipio que alcanzó el título de ciudad en 1867.
Al recorrerla, pedaleando en una de sus comunes bicicletas, se pueden observar los fuertes del siglo xix, la bala en la fachada del edificio de la empresa eléctrica, huella del criminal bombardeo de la escuadra de Estados Unidos a la ciudad el 11 de mayo de 1898, ataque que ocasionó bajas en la población civil.
En el Archivo de la Ciudad, en un ejemplar del Diario de la Marina del 15 de mayo de 1898, se puede leer: «Ha sido bombardeada una población sin defensas; llevada a la muerte, la destrucción y el espanto a gentes pacíficas; ha habido, en una palabra, refinamiento en la crueldad, deleite en el daño. ¡Qué bien quieren a Cuba! (…)». Y es esta última frase la manera de resumir con ironía las verdaderas intenciones yanquis.
Los españoles les hicieron aquí las primeras bajas que tuvieron en la Guerra hispano-cubano-norteamericana. Al finalizar la guerra, el 16 de diciembre de 1898, llegó por mar nuevamente la bandera cubana, pero esta vez como hija de la independencia, con el General Carlos María de Rojas y «La Brigada Cárdenas», que se encontraba en la zona de Varadero.
Y fue, precisamente, el propio General Carlos María de Rojas quien propuso el primer Mausoleo erigido a los mambises en nuestra Patria durante la Guerra de 1895. Corona el monumento una escultura en mármol de Carrara, obra de José Vilalta de Saavedra.
Un monolito a las madres y esculturas ambientales que representan la ciudad, como el Coche, la Bicicleta y el Cangrejo son partes esenciales de las tradiciones citadinas; son, también, la curiosidad que provoca volver la mirada.
Cárdenas fue y es una ciudad que ha visto nacer a grandes personalidades destacadas en la vida política y cultural del país: Rosa Pastora Lecler, la primera maestra internacionalista cubana; los escritores y dramaturgos Emilio Bobadilla, Virgilio Piñera y Rufo Caballero, así como los líderes estudiantiles José Antonio Echeverría y José Smith Comas, entre otros hijos de esta ciudad, quienes escribieron, también, parte de la historia patria.
El 8 de enero de 1959, el líder de la Revolución Fidel Castro, al frente de la Caravana de la Libertad, llegó a la ciudad para rendirle tributo a José Antonio Echeverría. Fidel regresó el 13 de marzo para tomar parte en la primera peregrinación a la tumba del dirigente universitario.
La Revolución cambió las condiciones de vida de los cardenenses al construir dos repartos en la década de los 60. En 1985, a pocas horas del paso del devastador ciclón Kate, el Comandante en Jefe visitó las áreas de la ciudad afectadas y propuso la construcción de un nuevo reparto para los damnificados.
Recién se ha constituido en Cárdenas una filial de la Oficina del Conservador de Matanzas, para la gestión y preservación de su patrimonio.
Aquí no se han perdido del todo las opciones culturales ante la mayor variedad de propuestas en el cercano polo turístico de Varadero, uno de los más importantes del país, ubicado dentro de los límites del municipio de Cárdenas.
La Enseña Nacional ha distinguido la historia del territorio, el apelativo de Ciudad Bandera resulta simbólico y un perenne compromiso patriótico para sus habitantes, con ese orgullo que sentimos pedaleando en una ciudad que, aún, encanta.

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