Esta es una nueva historia con otros protagonistas: el Doctor José Arego
Muro, un médico entregado en cuerpo y alma a la profesión durante casi
50 años, es devuelto a la vida por la determinación de otro colega, el
Doctor Carlos Yun Angarica.
Afectado de una braquicardia severa hace cuatro años, al Doctor Arego le fue implantado un Marcapasos en el Hospital Hermanos Amejeiras de la capital cubana y a causa de una enfermedad respiratoria aguda, el dispositivo se afectó y hubo que hacerle un recambio, que más tarde influyó en su mecanismo, provocándole un nuevo ataque, al punto de ponerlo al borde de la muerte.

Cuando sintió los primeros efectos, este reconocido radiógo fue trasladado al Hospital Territorial Julio Aristegui de Cárdenas y en la unidad de cuidados intensivos, se determinó la urgencia de su caso y llamó al Doctor Yun, de guardia en aquel momento y quien le había realizado la primera intervención .

De otro modo no hubiera llegado a rebasar su grave estado. El Doctor Arego volvió a la normalidad durante la intervención, que se efectúa con anestesia local y comenzó a conversar con sus compañeros, a quienes puso a prueba y salieron victoriosos, en particular el especialista de segundo grado, el Doctor CarlosYun Angarica de quien agradecido me dijo: Estoy vivo gracias a él...
Dos hombres a los que une la vocación de salvar vidas hoy celebran y prestigian una vez más a la medicina cubana , que en distintas generaciones los formó y convirtió en indispensables profesionales de la Ciudad Bandera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario