La reaparición de Fidel Castro Ruz en los últimos días llena de satisfacción al Pueblo, acostumbrado ya a sus oportunas Reflexiones, sobre todo en vísperas de una fecha tan significativa para los cubanos, como es el 26 de julio.
Sin embargo, esta última en Artemisa colmó las expectativas al mostrarse con su legendaria chaqueta verde olivo, a rendir tributo a los caídos en la gesta del Moncada y sepultados en el Mausoleo de ese municipio habanero, que contribuyó con sangre generosa a la obra de la Revolución.
La Ciudad Bandera que tan cerca estuvo de él, en el inicio de la Batalla de Ideas, ha estado pendiente cada vez que se trasmite su imagen y con la pasión que llena a los revolucionarios cuando del máximo líder se trata, la noticia de su homenaje a los Mártires del 26 de julio en Artemisa, corrió de boca en boca.
“Honrar honra”, dijo José Martí y el Comandante en Jefe que nunca ha olvidado a quienes a lo largo de la historia entregaron su vida por defender la Patria, se inclinó ante los compañeros ausentes físicamente, pero vivos en la memoria del Pueblo.
Vital fue el mensaje de Fidel, donde no perdió la ocasión de comentar de la amenaza que hoy se cierne sobre la humanidad y denunciar al Imperio que mantiene prisioneros a cinco valerosos cubanos, a quienes dijo sentirse obligado a recordar en una fecha gloriosa, que nada ni nadie puede impedir que celebremos.
La alegría de verlo en vísperas del Día de la Rebeldía Nacional y de poder decirle desde el fondo de nuestros corazones: COMANDANTE EN JEFE, ORDENE, estoy segura fue compartida por la mayoría de los cardenenses, que en esta localidad matancera tienen muy presente, como se traduce la idea martiana de que: “Patria es Humanidad”.
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